Con cerca de 100 policías ministeriales armados llegó el ex vicefiscal, Luis Enrique Orozco, a tomar protesta como Gobernador interino, aunque el Estado asegura que los diputados violaron la suspensión de un Juez de Distrito.
Esto, luego de que ningún otro priista ni panista, con credenciales o mérito político, aceptó arrojarse a tomar el cargo otorgado por el PRIAN en el Congreso estatal.
Ya la noche del 25 de octubre pasado el PRIAN había nombrado al magistrado, al panista José Arturo Salinas, como Gobernador interino.
Pero como los diputados ignoran la Constitución de Nuevo León que ellos mismos aprobaron este año, no se percataron que Salinas era inelegible. Que está impedido por ser un empleado del Poder Judicial.
Así que en otro episodio digno de una clase política en decadencia, los diputados del PRIAN organizaron, entre una turba de ciudadanos, porros del PRI y policías ministeriales armados, la toma de protesta de Orozco como Gobernador interino la noche del 29 de noviembre.
El objetivo del PRIAN es boicotear al Estado y la precandidatura Presidencial del Gobernador de Nuevo León con licencia, Samuel García.
La intención del boicot es porque García, como precandidato único a la Presidencia de Movimiento Ciudadano, acecha el segundo lugar rumbo a los comicios de 2024 y estaría enviando al tercer lugar a Xóchitl Gálvez, precandidata del PRIAN-PRD.
Por ello el PRIAN planeó durante todo el día, el pasado 29 de noviembre, hacer el nombramiento de cualquier partidario que se atreviera a rendir protesta como interino.
Además, el plan fue atropellado y decadente, porque los diputados del PRIAN fueron informados que el Secretario de Gobierno del Estado, Javier Navarro, obtuvo una suspensión de un juez de distrito.
